Las iniciativas solidarias en tiempos de necesidad son contagiosas. O, al menos, eso pretenden aquellos que las llevan a cabo. Antonio Gimeno es constructor y dirige la empresa Bigeco, que, en sus 30 años de funcionamiento ha construido hasta 15.000 viviendas en la Comunidad Valenciana.
La decisión de Gimeno tuvo una gran repercusión el pasado martes cuando se hizo pública la cesion de 25 viviendas al Ayuntamiento de la localidad valenciana de l'Alcudia para que puedan ser alquiladas a familias desahuciadas.
Este promotor madrileño, quien considera sin duda que «todos debemos aprender de esta crisis», afirma que «es un contrasentido que haya tanta gente que sufre, mientras existen muchas viviendas que se encuentran deshabitadas».
Este fue el motivo principal que lo llevó a ponerse en contacto con la Fundacion Todo Ayuda, la cual transmitió la iniciativa a Cáritas, y ésta a su vez con los servicios sociales del Ayuntamiento de l'Alcudia.
Según explica Gimeno el edificio estaba terminado desde hace dos años y con el «boom inmobiliario» se construyeron la mitad de las viviendas que se tenían previstas.
Hasta ahora, son diez las familias confirmadas que van a ocupar estos pisos, a la espera de otros quince pisos que serán habitados según las condiciones que decidan los servicios sociales del consistorio de la localidad.
Para Gimeno, la obligación de las empresas es «estar con la sociedad, incluso ayudando a incorporar a la gente al mercado». «Es fundamental el apoyo de las entidades financieras y creo que es posible conseguirlo. Los bancos tienen también viviendas que pueden ceder en lugares en los que existe verdadera necesidad», indica. Una solidaridad que confía en que vaya en aumento, incluso cuando pase la crisis.
La próxima iniciativa de Todo Ayuda será en el municipio castellonense de Vinaroz, donde se destinará una promoción de cuarenta viviendas que en la actualidad se encuentran al 92 por ciento de su construcción.
